La construcción del nuevo colegio Miguel Alba en el distrito de Soná en Veraguas, sufre un revés nuevamente, ya que la obra fue paralizada en su totalidad desde el pasado 24 de enero por decisiones de la empresa aseguradora.
Edicto Barrante, quien encabeza la comisión de seguimiento de esta obra, explicó que la empresa que tenía el proyecto lo abandonó, la cual la aseguradora deberá gestionar al menos tres empresas para que sean recomendadas al Ministerio de Educación, y esta institución a su vez seleccione quien debe reiniciar la obra, proceso que tardará hasta cuatros meses, de lo contrario sino se soluciona el problema podría ocasionar una demanda administrativa contra la compañía aseguradora la cual pondrá fin al proyecto y realizar otra licitación por parte del gobierno.
“La situación actual de la escuela Miguel Alba es bastante crítica porque realmente desde el 2015 iniciamos esta lucha para que se construyera nuestra escuela y solo hemos logrado durante todos estos años alrededor de un 20 por ciento de avance, nosotros los docentes igual que los padres familia y estudiantes estamos en constante reuniones analizando la situación y el MEDUCA lo sabe”, precisó el docente.
Señaló que esta nueva administración de gobierno ha mostrado interés en el proyecto, sin embargo, exigen respuestas concretas, donde no descartan que inicien el año escolar, con huelgas y paralización de labores.
Al respecto, el propio viceministro de infraestructura del MEDUCA, Ricardo Sánchez, informó que, en la última visita al proyecto, (6 de enero), que en efecto la construcción no iba al ritmo que se esperaba.
“Por parte del MEDUCA, se iba a colaborar con el cronograma de trabajo, y que por el momento no habian planes de entrar con otra empresa, ya que nuestro compromiso es que dicha obra termine lo antes posible”, fueron parte de las explicaciones del viceministro luego de esta inspección.
La escuela Miguel Alba, ubicada en el centro del distrito de Soná, tiene una matrícula de más de 900 estudiantes y 100 colaboradores entre docentes y administrativos, pero por no contar con un colegio tendrán que volver a sus aulas modulares y hasta locales alquilados como la han pasado en los últimos siete años, que no tienen las condiciones apropiadas para el proceso de enseñanza-aprendizaje.
La orden de proceder de la construcción de este plantel, fue entregada en enero del año 2016, en ese entonces por el expresidente Juan Carlos Varela, por un monto superior a los 10 millones de dólares.