En el distrito de Santa Fé recuerdan un año más la desaparición del padre Jesús Héctor Gallegos.

 

Agrupaciones indígenas y campesinas, se concentraron un año más en la plaza central del distrito de Santa Fé, para conmemorar los 48 años de desaparición del padre Jesús Héctor Gallegos.

 

El panorama en este distrito se mantiene como todos los años, donde los pequeños comerciantes y productores aprovechan el movimiento de personas para esta fecha para poner en ventas sus productos, mientras que en la Quebrada Las Trancas hasta el poblado se realizó la tradicional caminata.

 

Leopoldo González, es vocero comunitario en esa región, sostuvo que en los últimos años los movimientos campesinos han perdido fuerza, aparentemente por las influencias políticas y de gobierno, que buscan debilitar dichos movimientos, pero el legado del padre Gallego ha podido más que cualquier mal intención de acabar con estos recuerdos.

 

«La fé y la esperanza de saber donde están los restos de nuestro mentor espiritual es lo que lo nos hace cada vez unirnos más y no vamos a desistir de estos movimientos», remarcó este dirigente.

 

Por su parte, Jacinto Peña, amigo cercano y residente en Santa Fé, informó que aún se está a la espera de los resultados que brinde el Ministerio Público en cuanto a los restos del Sacerdote, para que se termine con la incertidumbre de la población santafereña de saber qué fue lo que realmente pasó.

 

Las campanas de la Iglesia San Pedro anunciaron que a eso de las 10:15 de la mañana iniciaba la Santa Misa en recordación de estos 48 años de la desaparición de este sacerdote.

 

El presidente actual de Panamá, Juan Carlos Varela, asistió a esta cita eucarística saludando a quienes estaban más de su puesto en primera fila y a la vez fue saludado por Monseñor Oscar Mario Brown, celebrante de esta especial eucaristía.

 

Finalmente se llevó a cabo el acto cultural donde reposa actualmente una estatua en su memoria y presentaciones de las escuelas participantes, a fin de conservar y recordar el apostolado del sacerdote Jesús Héctor Gallego.